Tu grande, tu padre
Puede que hayas hecho tuyo, desde tu grande, tu padre, los sentimientos de:
rechazo, abandono, menosprecio, de haberse aprovechado de tu amor,
quitado la capacidad de confiar, "matar" a una parte de tu otra grande
que es tu madre, de los tuyos y de ti...quitado mucho...o puede que
toda... la capacidad de CONFIAR Y AMAR.
Pero no deja de ser tu grande. Si no eres capaz de perdonarle, nunca te perdonarás. Deja su carga en él y déjale que siga su camino desde el respeto y el amor incondicional que te mereces y merece tu fuente, y consecuentemente él, tu padre, desde el PERDÓN.
Y si tu caso es la ausencia de esa figura de padre, simplemente déjale en el lugar que le corresponde, a él le debes la mitad de tu vida, sé agradecido a la vida, respeta, agradece y ama esa parte de ti, que te hace único, te hace valioso y te hace que pertenezcas a esos ancestros que aunque desconocidos forman parte de tu ser y tu destino.
O simplemente lo has tenido siempre incondicionalmente y presente, prevaleciendo en todo momento el amor, respeto y agradecimiento.
No puedes cambiar el pasado, pero sí el futuro.¡Rompe las cádenas! Y sigue tu camino, recuperando esos sentimientos que creías perdidos, siendo agradecido. Apuesta por la vida, tu ser, tu fuente y tu destino.
Pero no deja de ser tu grande. Si no eres capaz de perdonarle, nunca te perdonarás. Deja su carga en él y déjale que siga su camino desde el respeto y el amor incondicional que te mereces y merece tu fuente, y consecuentemente él, tu padre, desde el PERDÓN.
Y si tu caso es la ausencia de esa figura de padre, simplemente déjale en el lugar que le corresponde, a él le debes la mitad de tu vida, sé agradecido a la vida, respeta, agradece y ama esa parte de ti, que te hace único, te hace valioso y te hace que pertenezcas a esos ancestros que aunque desconocidos forman parte de tu ser y tu destino.
O simplemente lo has tenido siempre incondicionalmente y presente, prevaleciendo en todo momento el amor, respeto y agradecimiento.
No puedes cambiar el pasado, pero sí el futuro.¡Rompe las cádenas! Y sigue tu camino, recuperando esos sentimientos que creías perdidos, siendo agradecido. Apuesta por la vida, tu ser, tu fuente y tu destino.
Comentarios
Publicar un comentario